Desde inicios de su gestión como presidente de Estados Unidos Donald Trump ha puesto en evidencia la debilidad del Ejecutivo de nuestro país quitandole autoridad pero sobre todo liderazgo frente a otros países de América Latina, del mismo modo la manera en que EPN ha manejado las pocas cartas que tiene y al parecer ninguna ha sigo un “as”, resulta que quien ha seguido dando la cara por los mexicanos ha sido el Secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray.
Dentro de su última intervención en la Cámara Alta “Cualquier modificación que implique daño y no beneficio a la economía nacional no la aceptaría el Ejecutivo”, aseguró Videgaray, así mismo el canciller comentó que ya había dejado una postura clara ante los secretarios de Estado Rex Tillerson y al de Seguridad Nacional John Kelly que México “no aceptará que sean deportados a México inmigrantes centroamericanos o de otros países, como se mencionó en nuevos lineamientos migratorios publicados la semana pasada”.
Esto biene a meter más presión a la economía mexicana ya que seguimos estando en una postura débil frente a nuestro país vecino del norte.