La inversión directa no financiera de China en América Latina experimentó un crecimiento del 39 por ciento y alcanzó los 29.800 millones de dólares en 2016, según un informe publicado por el Ministerio de Comercio de China el 13 de febrero.
Además del incremento en volumen, la inversión china en la región obtuvo una mayor diversidad en cuanto a sus campos de destino.
Las áreas en las que América Latina recibió inversión del país asiático han sobrepasado las tradicionales de energía, minería e infraestructura, para cubrir una amplia gama de sectores que incluye agricultura, industria manufacturera, industria informática, sector servicios, comercio electrónico y transporte aéreo, entre otros.
El informe acentúa la mejora tanto cuantitativa como cualitativa de la inversión en el marco de un “desarrollo estable” de la cooperación económica y comercial sino-latinoamericana, que se caracteriza por un “aprendizaje mutuo y un desarrollo conjunto”.
En el informe también se comenta que 2016 fue un año en el que la complementariedad de China y América Latina en el aspecto económico y comercial “se materializó en forma de colaboraciones pragmáticas”, mientras que 2017 será un año de actualización estructural de las mismas.